Movimiento 15M: En perspectiva

Amigos de la nave del misterio, en las últimas semanas hemos asistido a una nueva y curiosa forma de ingeniería social. Si bien en otros blogs como Antimperialista o La Yihad en Eurabia  ha quedado demostrado que de espontáneo nada y de preparado por unos pocos mucho, os voy a dar mi opinión sobre este fenómeno de masas.

En un principio me pareció muy sospechoso que a cuatro elementos acampados en la Plaza del Sol se les diera tanta cobertura informativa, sobretodo cuando no tenían sobre qué informar. No se sabía que se reivindicaba, no había mensaje, decían algo sobre democracia real -cosa que a todos nos gusta- pero nada más. Podrían haber lanzado el mensaje que el chocolate está bueno y habrían conseguido lo mismo, hacer que el 98% de los españoles estén de acuerdo con que el chocolate está bueno. Una vez obtenido este primer beneplácito, pasadas unas 48h desde los primeros mensajes para agradar de boquilla al personal, se empezaron a lanzar nuevas consignas, que si la banca es mala, que si las pensiones vitalicias de los diputados son propias de canallas, etc. Hasta aquí todos estamos de acuerdo, porque poco a poco nos vamos metiendo en el ajo y formamos parte de este gran Show televisado las 24h Truman Style.

¡Skins y perroflautas unidos en la lucha! Y como os descuidéis, con el de la izquierda en la ducha. Según TVE estos valientes estaban aquí porque decían que esos malosos de Democracia Nacional iban a reventar la concentración. Permitidme el inciso de que en toda reunión hantifascista que se precie (sobretodo en los conciertos) siempre alguien ve un supuesto grupo de nazis que han agredido a algún compañero y se organizan cuadrillas que acaban dándole el palo a algún despistado con polo Lacoste al que a la vuelta calificaremos como un peligroso facha.

Pero poco a poco empezaron a surgir comisiones salidas de la nada, y líderes de éstas que tampoco se sabía de dónde salían, se adueñaron del cotarro y empezaron a desvariar con sus propuestas perrofláuticas y vanguardistas alejadas de las verdaderas ansias de libertad del pueblo español. Si incluso por ahí danzaba la hija mayor de ZP para restarle aún más credibilidad al asunto.

¿Clases de silencio? ¿Basta ya de fumigarnos con las estelas de los aviones? ¿Esto tiene algo que ver con lo que nos contaron al principio? Es más, ¿Un movimiento que se basa en estas gilipolleces puede a aspirar a algo?

De ahora en adelante desgranaré varios fenómenos que sustentaron el éxito en un primer momento del 15M:

– Fenómeno Facebook/Tuenti/Twitter: Estar en el ajo del 15M era un fuerte resorte social. Se suponía que estar ahí era algo bueno para nuestro futuro, y si no servía, pues al menos se había intentado. Este era el Woodstock español, el nuevo No a la Guerra, el heredero de los espontáneos Nunca Mais o de las sentadas en la calle Génova frente a la sede del PP. Y lo más importante, había que dar fe de que estuvimos allí, había que hacerse la foto de rigor y había que presumir y sentir pena de aquellos que no hacían nada por nuestro futuro, aunque de hecho estar de pie en una plaza repitiendo cánticos no fuese una actividad creadora en el sentido estricto de la palabra.

– Fenómeno Meterlaencaliente:  Además el 15M servía para ligar con las nenas porque te imbuías de espíritu revolucionario aunque tu cometido como becario fuese analizar empresas del sector a las que aplicar un ERE preventivo. El hecho de ver féminas jóvenes y por el hecho de ser liberales intuir cierta ligereza de cascos seguramente movilizaría a más de uno en aras de consumar un coito gratuito, y a otros, más románticos, en aras de encontrar el amor de su vida tras las barricadas para poder recordarlo cuando sean octogenarios y les cuenten a sus nietos lo bonita que puede llegar a ser una revolución.

– Fenómeno gamberro: A todos nos gusta desafiar al estado, ya sea cagarnos en la policía y en sus putas madres o yendo a 160 por la autovía. Toda una vida llena de multas, IRPFs e IVA no puede quedar impune.  Desafiar lo que decía la Junta Electoral mientras Rubalcaba guiñaba el ojito insinuando que ahí no iba a haber ningún desalojo era una invitación gratuita a saciar esas ansias de rebeldía, por otra parte tan típicas en el genoma ibérico desde los tiempos de Viriato.

– Fenómeno Nerd/Hipster: El típico estudiante de letras -a poder ser un progre que estudia derecho, económicas o ciencias políticas con la excusa de poder cambiar el sistema desde dentro- y el clásico basurillas que estudia danza, teatro o un máster en diábolos, aún a sabiendas de que han estudiado una carrera que no sirve para nada mientras que podrían haberse sacado un FP de tornero fresador y limitarse a leer a Hegel en la intimidad de sus habitaciones. Como decía, esta gente cuya salida laboral en el mejor de los casos pasa por ser profesor de historia cuando apruebe una oposición a los 38 años, y en el peor, opositar para ser auxiliar de biblioteca o del museo de su ciudad, se han unido enérgicamente también, incapaces de comprender que la culpa de su poco poder adquisitivo han sido las tocadas de huevos que se han pegado en la facultad, y no la dura situación económica. Lo peor de esta gente son sus soluciones a la crisis: nacionalizar bancos, todo gratis, papeles para todos y fronteras para nadie, e impuestos sólo para los ricos. Eso sí, pregúntales sobre una integral, o la ley de ohm. Ni puta idea y no servirían ni para colocar una bombilla, no son gente que aporten a la sociedad salvo para redactar leyes y demás tonterías sobre las que se apoyan los estados, es decir, pretenden ser nuestra salvación y son nuestro verdugo. También se puede aplicar a muchos ingenieros que cobran 4000€ al mes y se quejan porque son maricones o porque no se aceptan a si mismos como futura clase media-alta. Cuando llegan a los 50 y se les pasa la tontería se dedican a enseñar lo guays que son sus casas en la Sexta mientras adoptan (o compran por 30.000€) a un niñito de África o a una desvalida chinita.

Claro ejemplo de "15Mista": Igualdad social sí, boxers Calvin Klein de 30€ también.

En fin, que si este rollo hubiese sido más auténtico y menos manipulado por los perroflautas, y si, como dijo el gran Pérez Reverte, hubiesen puesto una guillotina o un garrote vil en su defecto en la Plaza del Sol y hubiesen pedido la cabeza del presidente como cantaban Dramatic Battle, todo habría ido a mejor. Por mi parte deberían hostigar a los diputados como hicieron en Barcelona.